Kuwait tiene a su nuevo primer ministro. El nuevo emir del rico estado petrolero del Golfo, que sucedió a su medio hermano fallecido en diciembre, nombró el jueves a un experimentado diplomático, Mohammed Sabah al-Salem Al-Sabah.
Este economista de 68 años era “el responsable de nombrar un nuevo gabinete”, según Kuna, con la esperanza de sacar al país de una larga crisis política y reformar un sector público hipertrofiado. Hijo del emir Sabah Al-Salem Al-Sabah, que reinó desde 1965 hasta su muerte en 1977, el nuevo primer ministro es una figura popular en su país.
Licenciado en Harvard, ocupó durante diez años el cargo de embajador de Kuwait en Estados Unidos, luego el de ministro de Asuntos Exteriores, antes de dimitir en 2011 en medio de una crisis política. Su dimisión fue vista entonces como un gesto de protesta contra la inacción del gobierno, acusado de mala gestión y corrupción. “Sus posiciones anticorrupción (…) en 2011 le valieron el respeto de los kuwaitíes”, dijo a la AFP Badr al Saif, de la Universidad de Kuwait.
El país del Golfo, fronterizo con Arabia Saudita e Irak, contiene el 7% de las reservas de crudo del mundo y tiene uno de los fondos soberanos más poderosos del mundo. Pero los bloqueos permanentes entre el Parlamento electo y el gobierno, dominado por la familia principesca de Al-Sabah, le impiden llevar a cabo reformas, en particular para diversificar su economía.
Leer tambiénEl funeral del Emir de Kuwait tuvo lugar solo en presencia de sus familiares
Cuando prestó juramento en diciembre, el nuevo emir, Mechaal al-Ahmad al-Jaber Al-Sabah, criticó al ejecutivo y a los funcionarios electos por haber “perjudicado los intereses del país” y se comprometió a revisar determinadas decisiones.
Para el analista kuwaití Ayed Al-Mannaa, el nuevo primer ministro tiene “la experiencia diplomática y las cualificaciones académicas necesarias para aplicar las reformas previstas” por el soberano. “Necesitamos (…) un gobierno formado por personas competentes y estadistas que no teman ser cuestionados por el Parlamento”.