El primer crucero construido en China zarpó el lunes de Shanghai en su viaje inaugural, simbolizando los avances del país en el sector de la construcción naval dominado por los fabricantes europeos. Para su primera navegación, el Adora Magic City y sus 16 cubiertas, según medios oficiales chinos, partieron del puerto de Shanghai rumbo a Corea del Sur y Japón.

Diseñado para atraer a la clase media china y satisfacer su creciente apetito por los viajes internacionales, el barco alberga un salón de mahjong especialmente dedicado y un restaurante especializado en fondue china. La construcción del barco se retrasó por la pandemia de Covid-19, según Lloyd’s Register (LR), que presta los servicios marítimos.

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Después de presentar a la prensa internacional su mayor avión de pasajeros producido en el país, el C919, a mediados de diciembre en Hong Kong ante la prensa internacional, China continúa su estrategia de emancipar las tecnologías extranjeras para proyectos de construcción complejos. Sin embargo, muchos componentes de Adora Magic City provienen de proveedores internacionales.

Pero en el futuro, “China tiene la oportunidad de construir su propia cadena de suministro”, afirmó Marco Scopaz, director de proyectos local de Lloyd’s Register (LR), en un artículo publicado en el sitio web del grupo. Este barco “marca el inicio del rápido e inevitable desarrollo del país en el diseño y construcción de cruceros”, añadió.