Casi dos años después de que Rusia comenzara la invasión de su país, los ucranianos ortodoxos participaron a partir del domingo por la tarde en los servicios religiosos para celebrar la Navidad del 25 de diciembre, al mismo tiempo que el mundo occidental, por primera vez en su historia y como señal de Desafío hacia Moscú.

“Rezamos por el fin de la guerra. Rezamos por la victoria”, dijo el presidente Volodymyr Zelensky. “Por la paz, por la justicia”, prosiguió ante un majestuoso monasterio que albergó hasta finales de 2022 al primado de la Iglesia ortodoxa ucraniana dependiente de Moscú.

Es la primera vez en la historia moderna de Ucrania que los creyentes ortodoxos celebran la Navidad al mismo tiempo que los católicos, pero también los ortodoxos griegos, rumanos y búlgaros, el 25 de diciembre y no el 7 de enero del calendario civil, como era tradicional hasta entonces.

De hecho, la Iglesia Ortodoxa Rusa ha mantenido el antiguo calendario juliano para las fiestas religiosas, desplazado 13 días. “Realmente queremos celebrar esta festividad de una manera nueva. Es una celebración con toda Ucrania, con nuestra Ucrania independiente”, explica Olena, citada por la AFP.

En julio, Volodymyr Zelensky formalizó el traslado de las celebraciones navideñas del 7 de enero al 25 de diciembre, una decisión que forma parte de una serie de medidas tomadas por Ucrania para distanciarse de Rusia.