Él acaba de terminar su gira por estados unidos y fue en el camino de regreso desde Nueva York. Ballake Sissoko, el 4 de febrero, ha puesto un pie en su casa en París para encontrar que su instrumento musical, la kora, se redujo en mil pedazos. El músico de malí, ha acusado a los guardias de fronteras de la Tsa, la Administración de Seguridad del Transporte, la U. s. gobierno de la agencia de seguridad del Transporte a cargo de los controles en los aeropuertos: «La kora es mi vida. Él me dio todo. La Tsa ha destruido mi vida», dijo.

La kora es un instrumento de África occidental con 21 cadenas que produce un sonido similar al de un arpa, imposible sustituir: «me Hubiera desmantelado un Stradivarius?». «Este es un gran sesgo cultural», fue anunciada por el ministro de Cultura de malí.

En un comunicado de prensa, n’diaye Ramatoulaye Diallo, dijo que estaba consternado por los daños en el instrumento: «Queda por determinar si es o no un acto deliberado. Sin embargo, este inmenso prejuicio cultural nos lanza un reto y vamos a empujar a hacer todo lo que es legal y diplomáticamente como sea posible.»