BANGKOK – Dos niñas de 16 y 20 años de edad, el más grande de la embarazada, son las primeras víctimas rohingya de la guerra en el curso de exactamente un año, en el Estado de birmania en el Arakán entre la guerrilla de los separatistas de la Arakán Ejército y las tropas de Myanmar. Sucedió en la mañana de ayer, sábado, inmediatamente después de la sentencia de la Corte internacional de Justicia, que ha pedido al gobierno que Aung San Suu Kyi que «tome todas las medidas en su poder» para evitar las violaciones de la Convención sobre genocidio de las Naciones Unidas.