Le Fígaro Nantes
Anatomía de una caída, versión Nantes. Se abrió una investigación tras la muerte de un joven de 22 años al caer desde una explanada en la isla de Nantes el 13 de diciembre. Perseguido en mitad de la noche por agentes de policía, el individuo, negándose a obedecer, huyó en una bicicleta robada de la estación SNCF de la ciudad. Después de perderlo de vista, la policía encontró al joven en agonía, debajo de un desnivel de 5 a 7 metros. Transportado al Hospital Universitario de Nantes y luego en coma, murió tres días después a causa de sus heridas.
La autopsia realizada el 18 de diciembre reveló que el joven falleció como consecuencia de un “traumatismo craneoencefálico importante, compatible con una caída desde gran altura”, informan nuestros compañeros de Presse Océan. La operación «no reveló ninguna lesión sospechosa», confirmó el jueves a Figaro el fiscal de Nantes, Renaud Gaudeul.
La investigación, abierta inicialmente «con el fin de investigar la causa de las lesiones graves», fue reclasificada el lunes como «investigación de las causas de la muerte». Confiado a un juez, debería permitir reconstruir con precisión la secuencia de acontecimientos que llevaron a la muerte del joven.
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Según la policía, los agentes del vehículo persiguieron al ladrón de bicicletas alrededor de la 1 de la madrugada de la noche del martes 12 al miércoles 13 de diciembre. El sospechoso cruzó el Loira, abandonó la bicicleta en la calle Françoise Giroud y luego perdió a la policía que lo perseguía al escalar una valla alta que bloqueaba el acceso a una explanada cerrada.
Imágenes de las cámaras de vigilancia incluidas en el expediente de investigación del Centro de Vigilancia Urbana mostrarían a la patrulla policial dando marcha atrás en este momento. El lugar de la supuesta caída del joven, al otro lado de la explanada, sin embargo, no está captado por las cámaras. Según una fuente cercana al caso, los policías implicados en la persecución no son, por el momento, sospechosos de haber provocado la caída de la víctima.
