El eclipse solar del 2 de julio fue espectacular, incluso visto desde el espacio. Es demostrada a partir de las imágenes de la sonda Proba 2 de la Agencia Espacial Europea (Esa). Las fotos fueron tomadas gracias a los ‘ojos’ del instrumento, el Intercambio, capaz de ver en el rango del ultravioleta a la turbulencia de la naturaleza de la superficie del Sol y de la corona, su parte exterior.