Rusia dijo el domingo que había derribado drones ucranianos en cuatro de sus regiones, incluidos los alrededores de la capital, Moscú, así como dos misiles ucranianos sobre el mar de Azov, un día después de un gran ataque con drones contra la ciudad desde Kiev.
Los ataques con aviones no tripulados tuvieron como objetivo regiones rusas fronterizas con Ucrania y alrededor de Moscú, dijeron las autoridades rusas. «La defensa aérea destruyó cuatro drones ucranianos sobre las regiones de Bryansk, Smolensk y Tula», dijo el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
Más temprano el domingo, Rusia aseguró que también habían sido derribados drones ucranianos sobre la región de Moscú y dijo que había derribado dos misiles ucranianos que se dirigían hacia su territorio sobre el mar de Azov. “La defensa aérea rusa localizó y destruyó dos misiles ucranianos sobre la zona del mar de Azov”, según un comunicado del Ministerio de Defensa ruso.
Por su parte, Ucrania afirmó haber derribado ocho de los nueve drones lanzados contra su territorio el domingo. Estas ofensivas se producen un día después de un gran ataque con drones lanzado por Moscú contra la capital ucraniana, presentado por Kiev como el más importante desde el inicio del conflicto en febrero de 2022.
Según Ucrania, Moscú lanzó el sábado 75 drones de ataque, principalmente hacia la capital Kiev, de los cuales 71 fueron derribados por las fuerzas ucranianas. Este ataque dejó cinco personas heridas, según los resultados comunicados el sábado por las autoridades, y privó de electricidad a decenas de edificios de apartamentos y edificios.
A medida que se acerca el invierno, Kiev se prepara para una nueva campaña de bombardeos masivos rusos contra sus infraestructuras energéticas y teme una situación similar a la del invierno de 2022, cuando millones de personas se quedaron sin electricidad en medio de una ola de frío.
El ataque con drones del sábado se produjo también en el día de la conmemoración en Ucrania del Holodomor, la gran hambruna de los años 1930 que causó la muerte de millones de ucranianos, un «genocidio» orquestado, según Kiev, por Iósif Stalin. En un mensaje conmemorativo del Holodomor, el presidente estadounidense, Joe Biden, aseguró el sábado que «las infraestructuras agrícolas de Ucrania están una vez más en el punto de mira deliberadamente» de Moscú, a la que acusó de dañar «deliberadamente» campos e infraestructuras agrícolas.
Rusia, por su parte, subraya que la hambruna de los años 30 causó víctimas no sólo entre los ucranianos, sino también entre los rusos, los kazajos y otras nacionalidades, en un contexto de colectivización de la tierra. Estas ofensivas también se producen en un momento en que Ucrania celebra el décimo aniversario de la revolución pro occidental de Maidan, que despertó la ira de su vecino ruso.