Joe Biden, tras una reunión con Xi Jinping en California, afirmó el miércoles 15 de noviembre que todavía consideraba a este último un “dictador”, utilizando una expresión que en el pasado despertó la indignación de Beijing. «Es un dictador en el sentido de que aquí hay un hombre que dirige un país, un país comunista, que se basa en una forma de gobierno totalmente diferente a la nuestra», afirmó durante una rueda de prensa.