El ministro de Economía, Bruno Le Maire, aseguró el martes que garantizará «firmemente» que las actividades estratégicas del grupo francés de TI Atos permanezcan «bajo el control exclusivo de Francia».
«Mi única responsabilidad, y créanme, la ejerceré con toda la firmeza necesaria, es garantizar que las actividades estratégicas de Atos permanezcan bajo control francés», declaró Bruno Le Maire ante la comisión de Asuntos Económicos del Senado, recordando que el El grupo era completamente privado. «Tengo los medios para hacerlo gracias al decreto sobre inversiones extranjeras en Francia para garantizar que el capital de Atos en actividades estratégicas permanezca bajo el control exclusivo de Francia», añadió. Atos, que genera pérdidas y está muy endeudada, planea dividirse en 2022 con, por un lado, la rama Tech Foundations (outsourcing) y, por el otro, la rama estratégica Eviden (nube, ciberseguridad, supercomputadoras). El verano pasado, el grupo decidió vender Tech Foundations al multimillonario checo Daniel Kretinsky. Eviden, por su parte, cotizaría en Bolsa, tras una ampliación de capital de 900 millones de euros.
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A cambio de la compra de Tech Foundations, el multimillonario aceptó participar en la ampliación de capital de Eviden por valor de 217 millones de euros. Pasaría entonces a ser propietario del 7,5% del capital. Esta posible entrada del empresario checo en una rama estratégica, que también trabaja para la defensa y la disuasión nuclear francesa, ha provocado protestas, en particular entre los cargos electos de LR, los círculos empresariales y los fondos de accionistas. A principios de noviembre, la empresa Onepoint, que no había conseguido comprar las actividades estratégicas de Atos en 2022, volvió a tomar fuerza convirtiéndose en el mayor accionista del grupo, con el objetivo de presionar a la dirección de Atos para que modificara el acuerdo con Daniel Kretinsky para poder sacarlo de Eviden.