Johan Zarco tuvo su día de gloria este sábado en Australia al ganar su primer gran premio en la categoría reina con 33 años y después de 120 carreras, pero el francés aún vivía una enorme frustración ya que en el podio, ninguna Marsellesa sonaba para saludar a su actuación.
Si bien los espectadores escucharon el himno nacional gracias a la señal de televisión in situ, el piloto francés subió al palco en silencio antes de recibir su trofeo. Sorprendido, Zarco cantó alto y claro las palabras firmadas por Claude Joseph Rouget de Lisle a capella delante de su equipo, acompañándolo con aplausos. Pero no dejó de expresar su descontento ante el micrófono del Canal por este lamentable contratiempo.
“El himno, le dije al presidente de la Federación Internacional que era un escándalo porque no estaba en el podio. Para el primero de mi carrera en MotoGP, me hubiera gustado un poco de emoción. Todavía feliz de saberlo y de haber podido cantarlo fuerte hasta el final”, explicó con amargura antes de agregar: “La emoción la queremos vivir hasta el final y nos damos cuenta de que la gente no la está gestionando bien y nos estropea estos momentos.