Un hipnoterapeuta parisino acusado de violación y agresión sexual a pacientes fue arrestado el martes por la mañana en su oficina, según supo Le Figaro a través de una fuente cercana al caso. Al finalizar su detención policial, el practicante – que niega los hechos alegados – fue acusado de «violación cometida por una persona que abusa de la autoridad que le confiere su cargo en perjuicio de tres víctimas, y agresión sexual en perjuicio de 4 víctimas”, nos dijo la fiscalía de París.

Contrariamente a las exigencias del fiscal, el acusado fue puesto bajo supervisión judicial, con prohibición de cualquier ejercicio profesional en el sector sanitario. Las investigaciones llevadas a cabo por el primer distrito de la policía judicial desde finales de julio continúan ahora en el marco de una investigación judicial.

Estas mujeres, de entre 24 y 48 años, denuncian agresiones sexuales y violaciones ocurridas entre 2020 y 2021 en la consulta del hipnoterapeuta, situada en el oeste de París. “Personalmente fui víctima de graves acciones inapropiadas durante mi sesión, hasta tal punto que me vi obligado a consultar a un psicólogo para superarlo”, dice uno de ellos en una reseña dejada en Google para advertir a futuros pacientes.

Otra mujer explica que buscó la atención del practicante cuando estaba “pasando por un período psicológicamente complicado. Por tanto, era muy vulnerable. Se comportó e hizo gestos muy inapropiados, bajo el pretexto de una necesidad terapéutica”.

Cuando un tercer paciente denunció en Internet las «prácticas cuestionables [del hipnoterapeuta] en las partes íntimas del cuerpo», el practicante denunció en respuesta «comentarios difamatorios e indignantes». “La confianza es fundamental para una sesión eficaz”, afirma, y ​​añade: “Me siento a una distancia de 1,50 metros y si necesito acercarme, siempre pido permiso a la persona”.

Ante los investigadores, el sospechoso, ya conocido por la policía por actos de robo y fraude, negó firmemente las acusaciones de sus pacientes. Por el contrario, planteó la posibilidad de que algunas mujeres tengan la sensación de ser tocadas sin que exista contacto físico. Un fenómeno que describe como una “sensación cenestésica” (según la definición de Larousse: “sensación vaga que cada individuo tiene de la totalidad o parte de su cuerpo, independientemente de la ayuda de los sentidos”).