El cuerpo de un hombre de treinta años fue encontrado, atado de pies y manos, la tarde del domingo 24 de septiembre en Mataiea, al sur de la isla de Tahití, y cinco hombres, entre ellos dos menores, fueron puestos bajo custodia policial, según informó informes de los bomberos y de la fiscalía, citados por la AFP.
“Estaba maniatado, con marcas de golpes en el rostro”, explicó el jefe de bomberos de Mataiea, Gastón Tunoa. El cuerpo fue encontrado en un terreno baldío el domingo por la noche, afirmó esta fuente, confirmando informaciones del canal de televisión TNTV.
La autopsia concluyó que murió por asfixia tras estrangulamiento, según un comunicado de la fiscalía. Como parte de la investigación, tres adultos y dos menores fueron detenidos. La muerte se habría producido, según la fiscalía, “durante una pelea entre la víctima y los sospechosos en el probable contexto de una transacción de estupefacientes”.
La víctima, de 32 años, había sido detenida por tráfico de metanfetamina. La sección de investigación de la gendarmería de Papeete ha abierto una investigación sobre asesinato y tráfico de drogas.
Al menos 10.000 polinesios, sobre una población de 280.000 habitantes, ya han consumido «hielo», nombre local de la metanfetamina, según las estimaciones de la fiscalía. Esta droga sintética especialmente dura y adictiva, también llamada por los polinesios “no dormir”, se importa de México o California y se vende a más de 2.500 euros el gramo en Tahití. Sin embargo, los asesinatos relacionados con las drogas son raros en la Polinesia.