Un caso que podría haber degenerado gravemente. El viernes 1 de septiembre, mientras el FC Nantes se enfrentaba al Olympique de Marseille en el estadio Beaujoire de Nantes (Loira Atlántico), un hombre de 39 años sufrió un infarto durante el partido.
Según informa France Bleu, el padre, procedente del departamento de Loira Atlántico y seguidor del OM, fue atacado por aficionados del FC Nantes durante el partido, mientras se encontraba en la tribuna del Océane. Según el testimonio de su esposa en X (antes Twitter), el hombre fue agredido durante toda la reunión frente a su hijo de 6 años. “Nuestra culpa: ser seguidor del OM y dejarle vestir su camiseta para el partido. Nos agredieron durante el partido: escupitajos, insultos, nos tiraron cervezas a la cara…”, escribió.
Mientras el padre de familia intentaba protestar y defender a su familia, sufrió un infarto. Salvado in extremis por los servicios de emergencia tras haber sufrido dos paros cardíacos, fue evacuado a un hospital del CHU de Nantes. Actualmente se encuentra en cuidados intensivos, según afirma también su esposa, que denunció el comportamiento intolerable de algunos aficionados del Nantes mientras su marido era evacuado. «Y de nuevo algunos idiotas del stand del Loira no tuvieron respeto: selfies delante de la ambulancia, insultos de nuevo…», describió en X.
La dirección del FC Nantes reaccionó indicando que “condena con la mayor firmeza la violencia inaceptable cometida contra una familia de aficionados del OM durante el partido Nantes-Marsella del sábado por la noche. El club intenta ponerse en contacto con la familia para garantizar su mayor solidaridad”, indicó France 3 Pays de la Loire. Este episodio recuerda el ataque al pequeño Kenzo y su familia, también seguidores del Olympique de Marsella. El joven y sus padres afirman haber sido insultados y golpeados por aficionados del AC Ajaccio durante un partido celebrado el 3 de junio. Tres hombres fueron juzgados el 25 de agosto por este caso. Se solicitaron penas de entre 12 y 18 meses de pena suspendida contra estos tres aficionados del Ajaccio, acompañadas de una multa de 1.500 euros y una prohibición de acceder al estadio durante cinco años. El veredicto quedó reservado hasta el 8 de septiembre.