La madre del presidente de la Federación Española de Fútbol, ​​Luis Rubiales, que inició una huelga de hambre el lunes para apoyar a su hijo, fue trasladada a un hospital local el miércoles después de sentirse cansada y estresada, dijo el sacerdote local.

Ángeles Béjar se había encerrado en una iglesia de su ciudad natal de Motril, en el sur de España, para protestar por el trato recibido por su hijo en el caso del beso en la boca de la mundialista Jenni Hermoso, que motivó su suspensión por parte de la FIFA el Sábado.

Fue trasladada al hospital Santa Ana de Motril el miércoles por la tarde, según dijo a los periodistas el sacerdote, que se identificó como el padre Antonio, sin dar más detalles. El Hospital Santa Ana no confirmó si Béjar había sido internado allí.