La cabeza en las estrellas. El martes 8 de agosto, James Webb, el telescopio espacial de la NASA, fotografió la estrella más distante jamás observada. La estrella, llamada Earendel (Nota del editor: “estrella de la mañana” en inglés antiguo), está a 28 mil millones de años luz de nuestro planeta y fue detectada en marzo de 2022 por el telescopio Hubble. La precisión inigualable del telescopio James Webb, un dispositivo valorado en más de 10 mil millones de dólares, permite saber más sobre Eärendel.

Earendel es tan remoto que su luz, capturada por James Webb, fue emitida dentro de los primeros mil millones de años después del Big Bang. Todo esto mientras la edad del Universo se estima en 13.800 millones de años. Según la NASA, la estrella que ostentaba el récord anterior databa de 3.000 millones de años después del origen del Universo.

Las cámaras infrarrojas del satélite de la NASA confirman que Eärendel es una estrella de tipo B: una estrella de colores azul-blanco, muy brillante y caliente. De hecho, la temperatura de Eärendel es el doble de la del Sol, según las observaciones de James Webb. Earendel también sería casi un millón de veces más brillante que el Sol.

Los astrónomos de la NASA también creen que han identificado colores más cálidos cerca de Eärendel. Esto podría significar que Eärendel no está sola, que forma parte de una estrella binaria: dos estrellas que orbitan alrededor de un centro de gravedad común.

Las cámaras infrarrojas de James Webb también ayudarán a aprender más sobre Sunrise Arc, la galaxia Earendel. Según la NASA, varias series de análisis de datos deberían permitir a los astrónomos conocer el tamaño y la composición precisa de la galaxia. Sin duda, el telescopio James Webb está empujando la astronomía a otra dimensión.