El castillo del Clos Lucé de Amboise (Indre y Loira), última morada de Leonardo da Vinci, acoge una exposición sobre animación con motivo del estreno en cines de la película Léo, la fabulosa historia de Leonardo da Vinci dirigida por Jim Capobianco, guionista de El Rey León y Ratatouille.

La exposición, hasta el 12 de mayo, lleva al visitante al corazón de la creación de una película de animación “stop motion” (cuadro a cuadro), desde los primeros borradores hasta la retransmisión en la gran pantalla. El objetivo: poner en primer plano el trabajo titánico de decoradores, creadores de utilería, artesanos y animadores para producir sólo cuatro segundos de imágenes cinematográficas al día. “Quería utilizar stop motion y animación en el dibujo porque me parece más leonardiano. Para el stop motion hay que recurrir a muchas profesiones diferentes, a muchos artesanos. Desde escultores hasta diseñadores de vestuario y animadores”, explica el director estadounidense a la AFP.

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En su película estrenada en cines el 31 de enero, el ex colaborador de los gigantes Disney y Pixar quiso “explorar el lado humano” de Leonardo, “su lado “medio”. “Puede que sea un genio, pero todavía tiene un jefe, escribe listas de compras. También falló algunas veces. Quería contar este lado de la historia, con el que todos podemos identificarnos”, explica. “Léonard fue también (…) un artesano del espectáculo”, responde el director de Clos Lucé, François Saint-Bris. “Organizador de fiestas, realizó espectáculos extraordinarios que asombraron a las cortes de Europa. Esta labor artística encuentra eco en el trabajo de la mano del diseñador, la mano de los artistas y artesanos que fabrican minuciosamente decorados y títeres.

A través de modelos, títeres y dibujos en particular, la exposición explora las cinco fases de esta comedia dedicada al final de la vida de Leonardo, fallecido en Amboise en 1519. Primero está la concepción artística, luego el volumen gracias a los decorados, la la animación stop motion, los pasajes de dibujos animados que marcan la película y, finalmente, la fase final de refuerzo sonoro de la obra.

“La disposición de la exposición permite seguir el avance del proyecto, los bocetos, el storyboard, la creación de los títeres, los decorados. Permite descubrir todo el proceso de animación, abriendo una pequeña ventana a Leonardo”, aprecia Jim Capobianco, que quiso resaltar el trabajo del estudio francés Foliascope, donde se realizó la película.

Léo, Entre bastidores de la película de animación, en el Château du Clos Lucé, 2, rue du Clos Lucé, 37400 Amboise. Hasta el 12 de mayo. Entradas en la web oficial del castillo.