El Comité Interministerial para la Reestructuración Industrial (Ciri) ayudó en 2022 a reestructurar 31 empresas en dificultades, volviendo así a sus niveles anteriores al Covid-19, dijo el lunes la organización, destacando sin embargo que la industria francesa había estado particularmente expuesta a la inflación de los precios de la energía.

«Tras un incremento muy fuerte del número de derivaciones en 2020 vinculado a las consecuencias de la crisis sanitaria, la actividad de Ciri se ha normalizado desde 2021 con 34 nuevas derivaciones en 2021 y 31 en 2022», cubriendo «más de 53.000 puestos de trabajo», la organización dijo en su informe de actividad de 2022, publicado el lunes. Estos volúmenes están «cerca del nivel observado antes del período Covid» -32 empresas atendidas en 2019, lo que representa 59.884 empleados-, «materializando así una vuelta a la normalidad en la actividad del comité», se especifica, mientras que se habían producido 70 nuevas derivaciones. en 2020 (lo que representa más de 96.000 puestos de trabajo).

Las 31 nuevas referencias en 2022 “hacen eco de la resistencia a la inflación y a la guerra en Ucrania del tejido económico francés”, saludó el ministro de Economía, Bruno Le Maire, citado en el comunicado de prensa. Sin embargo, el ejercicio 2022 ha supuesto un retorno “significativo” de las solicitudes de ayudas de empresas pertenecientes al sector industrial, que suponen el 69% de las nuevas remisiones. “Esto se explica en particular por su alta exposición al aumento del costo de la energía y las materias primas observado a partir del 1er semestre de 2022”, así como por la “crisis de componentes” que afectó a la industria automotriz, electrónica y aeronáutica. subcontratistas, descifra el Ciri. «El sector de la distribución y el comercio de artículos textiles se mantiene» también «muy presente» (19% de nuevas referencias), «reflejando los fuertes cambios del sector en curso durante los últimos 10 años», subrayó el Ciri, mientras que los franceses están listos -to-wear empresas están pasando por una serie de dificultades, entre colocaciones en suspensión de pagos y liquidaciones.

Por el contrario, el número de empresas de turismo, eventos y transporte -sectores directamente afectados por la pandemia- que han solicitado la organización en 2022 “lógicamente se ha reducido mucho respecto a los dos años anteriores”. En detalle, de los 31 expedientes tramitados en 2022, 23 tuvieron “resultado favorable” (para 35.529 puestos de trabajo), 7 siguen en trámite y uno terminó en fracaso.

Creado en 1982, el Ciri puede apoyar a las empresas de más de 400 empleados para ayudarlas a transformarse, con el objetivo de continuar la actividad preservando “el máximo número de puestos de trabajo”.