Un hombre de 71 años fue acusado y puesto en prisión preventiva el lunes por la noche por «asesinato» e «intento de asesinato». Se sospecha que entró el sábado por la noche en casa de una familia británica que disfrutaba tranquilamente de su jardín en Plonevez-du-Faou en Finisterre, y les disparó varias veces.
Una niña de 11 años que iba en un columpio murió, su padre resultó gravemente afectado, su madre más levemente, mientras que su hermanita de 8 años logró huir y alertar a los que la rodeaban.
El acusado y su esposa dieron «positivo en alcohol y cannabis en el momento de su puesta bajo custodia policial», dijo la fiscal Camille Miansoni durante una conferencia de prensa en Brest. “A nivel estrictamente judicial, son personas sin antecedentes”, agregó. En su domicilio se encontraron dos armas y cannabis «degradado» en forma de «hierba seca».
Según los primeros elementos de la investigación, «un viejo conflicto vecinal, una exasperación» en torno a un terreno contiguo a las dos propiedades opuso a las dos familias durante varios años. Hubo «mucho trabajo de poda, desbroce», que desde el punto de vista del imputado y su mujer, «perturbaba su tranquilidad», detalló el magistrado. Tras los hechos, el sospechoso se refugió en su domicilio, en compañía de su esposa. Luego de negociaciones con Gendarmería y el GIGN, ambos terminaron entregándose y fueron detenidos alrededor de las 23:00 horas. La mujer fue puesta en estado de testigo asistido y liberada.