Decir que Carlo Ancelotti cumple con Eduardo Camavinga en el Real Madrid es quedarse corto. “Eduardo es intocable, como (Luka) Modric y como (Toni) Kroos. Juegue donde juegue, juega muy bien”, elogió el técnico madridista a principios de marzo. El sábado por la noche, tras la victoria de la Real ante el Celta de Vigo en Liga (2-0), Ancelotti calificó al centrocampista francés de 20 años como un «jugador especial». Le dio capa el lunes, en la víspera de un viaje a Girona.

“Está evolucionando muy bien. Aprovechó su tiempo de juego como lateral izquierdo para empujar sus límites que tienen que ver con su edad, su experiencia y su conocimiento táctico, nada más”, desarrolló Ancelotti. El técnico italiano cree que «técnicamente, (Camavinga) no tiene más que aprender y físicamente, tiene un motor Ferrari, no es un Fiat 500».

Camavinga ha jugado 49 partidos con el Real Madrid esta temporada, más que cualquier otro jugador. El ex Rennais ha sido titular en 26 ocasiones, sobre todo en octavos y cuartos de final, de ida y vuelta, con la Real en la Champions League. Los merengues son segundos en LaLiga a once puntos del FC Barcelona.