El rey Mohammed VI nombró el sábado 22 de abril a un nuevo inspector general de las Fuerzas Armadas Reales de Marruecos (FAR), el número dos del ejército, el general Mohammed Berrid, en un contexto de tensiones regionales, según una nota de prensa del palacio real. “Su Majestad el Rey Mohammed VI ha tenido la amabilidad de nombrar al Mayor General Mohammed Berrid Inspector General de las FAR, Comandante de la Zona Sur, en sustitución del Teniente General Belkhir El Farouk”, precisa la escueta nota de prensa difundida por la agencia de noticias MAP.

No se reveló el motivo del reemplazo del general El Farouk, pero este último apareció en silla de ruedas durante el traspaso de poder, lo que sugiere que es por razones médicas. El hombre de 75 años ocupaba el cargo de inspector general de las FAR y comandante de la Zona Sur -que cubre el territorio en disputa del Sáhara Occidental- desde mediados de septiembre de 2021.

Su sucesor, el general Berrid, nacido en 1955, es laureado de la Real Academia Militar, en vehículos blindados, y «cuenta con una rica experiencia militar de unos 43 años en el campo de la preparación y entrenamiento de fuerzas», indica una nota de prensa de la Estado Mayor de las FAR. Casado y padre de cuatro hijos, es miembro del Colegio Conjunto de Defensa (CID) en Francia. Mohammed Berrid había estado a cargo de la coordinación conjunta dentro del personal de las FAR desde 2014.

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Según la Constitución marroquí, es el soberano quien es el comandante supremo de los ejércitos y combina las funciones de jefe de estado mayor. El ejército marroquí, en proceso de modernización, cuenta con unos 310.000 soldados y 150.000 reservistas, según el sitio especializado «Global Firepower». Este cambio al frente de las FAR -anunciado el día de la festividad de Eid-El-Fitr que marca el final del Ramadán- se produce en un clima de mayor rivalidad y carrera armamentista con la vecina Argelia.

En el centro de estas tensiones se encuentra el conflicto del Sáhara Occidental, antigua colonia española, que desde 1975 enfrenta a Marruecos con el separatista Frente Polisario, apoyado por Argel. Marruecos, que controla el 80% del Sáhara Occidental, propone un plan de autonomía bajo su soberanía para este territorio desértico de 266.000 km² situado al norte de Mauritania. El Polisario pide un referéndum de autodeterminación.

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Otra manzana de la discordia: la cooperación militar (drones, sistemas de defensa antiaérea) y de seguridad entre Marruecos e Israel, que se ha acelerado desde su normalización diplomática en diciembre de 2020. El antagonismo entre las dos potencias magrebíes también está alimentando una carrera por la independencia armamentista. .

Estados Unidos acaba de aprobar un contrato para vender 18 sistemas de lanzacohetes Himars a Marruecos, mientras que el ejército argelino depende principalmente de equipos rusos.