Líbano expulsó a unos 50 sirios en el espacio de dos semanas, enviándolos de regreso a su territorio devastado por la guerra, en medio de un creciente sentimiento antisirio agravado por la crisis económica, dijeron el viernes dos fuentes concordantes. «El ejército ha expulsado a más de 50 sirios del Líbano en las últimas dos semanas», dijo a la AFP un oficial del ejército, bajo condición de anonimato, información confirmada por uno de sus homólogos.
La unidad de inteligencia del ejército libanés apuntó a los sirios indocumentados, dijeron las mismas fuentes, arrestándolos y luego entregándolos a los guardias fronterizos, quienes luego los expulsaron del Líbano. «Los centros de detención del ejército están llenos» y otras agencias de seguridad se han negado a acoger a los refugiados detenidos, justificó el oficial del ejército al comentar el movimiento.
Cientos de miles de sirios huyeron al vecino Líbano tras el inicio de la guerra civil en 2011 y la brutal represión de las protestas contra el régimen. Según las autoridades, aproximadamente dos millones de refugiados sirios se encuentran en territorio libanés. Cerca de 830.000 de ellos están registrados en las Naciones Unidas.
Las autoridades libanesas no coordinaron sus esfuerzos con Damasco, dijeron funcionarios militares y de seguridad, y agregaron que algunos de los refugiados expulsados habían regresado al Líbano con la ayuda de contrabandistas que les cobraban 100 dólares por persona. Una fuente humanitaria dijo a AFP que había notado un aumento en las redadas de inteligencia del ejército contra las comunidades sirias en Beirut y la región del Monte Líbano desde principios de abril.
“En 2023 se produjeron al menos cinco allanamientos”, dijo esta fuente, que pidió el anonimato. Unos 450 sirios han sido arrestados y se ha confirmado que al menos 66 serán deportados, dijo. Desde que el régimen de Damasco recuperó el control de la mayor parte de Siria, algunos países anfitriones han tratado de expulsar a los refugiados, citando un relativo fin de las hostilidades. Desde 2019, Líbano se encuentra sumido en una crisis económica que, según el Banco Mundial, es una de las peores de la historia moderna.