The Wall Street Journal (WSJ) ha pedido la expulsión del embajador ruso y los periodistas estacionados en los Estados Unidos tras el arresto de uno de sus periodistas estadounidenses en Rusia bajo sospecha de espionaje.
«Expulsar al embajador ruso de Estados Unidos, así como a los periodistas rusos que trabajan allí, sería lo mínimo que podemos hacer», dice el diario internacional estadounidense tras una petición del consejo editorial del WSJ en un editorial publicado en la noche. del jueves 30 al viernes 31 de marzo.
Le président américain Joe Biden a demandé ce vendredi à Moscou de «laisser partir» Evan Gershkovich, face à des journalistes qui sollicitaient sa réaction, tandis que le démocrate de 80 ans s’apprêtait à quitter la Maison-Blanche pour un déplacement dans le sud de los Estados Unidos.
«El momento del arresto parece una provocación calculada para avergonzar a Estados Unidos e intimidar a la prensa extranjera que aún trabaja en Rusia», agregó el Wall Street Journal. El Kremlin advirtió el jueves a Washington contra cualquier forma de represalia contra los medios rusos que trabajan en Estados Unidos tras el arresto del periodista estadounidense capturado, según Moscú, «en el acto» de espionaje.
“Con respecto a la solicitud de expulsión de todos los periodistas rusos, el periódico (WSJ, nota del editor) puede decir esto, pero esto no debería suceder. Simplemente no hay razón para eso”, dijo el viernes a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov. Agregó que el periodista estadounidense «fue atrapado en el acto (de espionaje)» y que, por lo tanto, «la situación es clara». Evan Gershkovich, un reportero de habla rusa de 31 años conocido por su minuciosidad, fue arrestado en Ekaterimburgo, en los Urales, bajo sospecha de “espionaje”.
Negó los cargos en su contra durante una audiencia en un tribunal de Moscú, según la agencia de noticias estatal rusa Tass. No obstante, el periodista estadounidense ha sido puesto en prisión preventiva hasta el 29 de mayo, una medida que puede extenderse a la espera de un posible juicio. Según Tass, el caso ha sido clasificado como «secreto», lo que restringe la publicación de información al respecto. Los únicos detalles disponibles en esta etapa: el FSB anunció que había «frustrado la actividad ilegal» al arrestar a Evan Gershkovich en Ekaterimburgo, en una fecha no especificada.
Su detención se produce en un contexto de mayor represión en Rusia contra la prensa desde la ofensiva contra Ucrania, que ha tensado mucho las relaciones entre Moscú y Washington. La Casa Blanca criticó un arresto «inaceptable» y la portavoz Karine Jean-Pierre calificó el cargo de espionaje de «ridículo», mientras que el ministro de Relaciones Exteriores de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo que estaba «extremadamente preocupado». La Unión Europea, a través de la voz de su jefe de la diplomacia, Josep Borrell, «condena» la detención de Evan Gershkovich por parte de Rusia, en un tuit en el que denuncia el «desprecio sistemático» de Moscú a la libertad de prensa.