Turquía aprobó el jueves 30 de marzo, tras diez meses de incertidumbre y un breve debate parlamentario final, la entrada de Finlandia en la OTAN, convirtiéndose en el último país de la Alianza en dar luz verde tras el de Hungría el pasado lunes. Los diputados turcos votaron por unanimidad de los 276 presentes. La candidatura finlandesa, ahora aprobada por la totalidad de los 30 estados miembros de la organización, fue ratificada por los votos de los 276 diputados votantes, según los operativos de votación retransmitidos en directo por televisión, pero la de Suecia, presentada de forma simultánea, sigue bloqueada por Ankara.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dio la bienvenida inmediatamente a la votación y dijo que haría que «la familia de la OTAN sea más fuerte y segura». “Acojo con beneplácito el voto” del Parlamento turco “para completar la ratificación de la adhesión de Finlandia. Esto hará que toda la familia de la OTAN sea más fuerte y segura”, tuiteó el funcionario noruego.

“Finlandia será un aliado fuerte y capaz”

El presidente finlandés agradeció a los 30 países miembros de la OTAN su «apoyo» a su ahora inminente ingreso. “Quiero agradecerles a todos su confianza y apoyo”, dijo el jefe de Estado del país nórdico Sauli Niinistö en un comunicado de prensa, deseando que Suecia ingrese “lo antes posible”. “Finlandia será un aliado fuerte y capaz, comprometido con la seguridad de la alianza”, prometió. “Nos defenderemos unos a otros”, prometió por su parte la primera ministra finlandesa, Sanna Marin, que intentará ganar un segundo mandato en las elecciones legislativas del domingo. “Finlandia apoya a Suecia, ahora y en el futuro, y apoya su candidatura”, dijo en Twitter.