Cinco personas murieron y otras 27 resultaron heridas, incluidas 12 de gravedad, en un accidente de tráfico el miércoles 29 de marzo en Marruecos, cerca de Rabat, según supimos de las autoridades locales. Un minibús chocó contra un árbol después de que el conductor perdiera el control de su vehículo en la localidad rural de Brachoua, a unos cincuenta kilómetros de la capital, según las mismas fuentes. Los heridos fueron hospitalizados, 12 de ellos en estado grave. Se ha abierto una investigación.
Las carreteras de Marruecos -y más generalmente de los países del Magreb- tienen fama de ser peligrosas y los accidentes son frecuentes. Entre los más graves, 11 personas murieron y 43 resultaron heridas en un accidente de autobús el 22 de noviembre cerca de la localidad de Taza, en el noreste del reino. Otro accidente de autobús dejó 23 muertos y 36 heridos el 17 de agosto de 2022 al este de Casablanca, uno de los dramas de tráfico más mortíferos en Marruecos en los últimos años.
Los autocares y minibuses son un medio de transporte muy utilizado por los marroquíes, especialmente los más modestos que no pueden permitirse un coche, para desplazarse por zonas rurales y aisladas. En 2022, los accidentes de tráfico acabaron con la vida de más de 3.200 personas en Marruecos, una cifra un 7% inferior a la del año anterior, según las últimas estadísticas de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (NARSA).
Las autoridades marroquíes han puesto en marcha una serie de medidas para intentar combatir la lacra de la inseguridad vial, y reducir a la mitad la tasa de mortalidad para 2026, tras el peor accidente de autobús de la historia del país en 2012 (42 muertos).