Unas 530 personas han muerto, muchas de ellas a manos de francotiradores, y casi 280 han sido secuestradas por bandas que operan con impunidad en Haití, dijo el martes la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
“Solo en las dos primeras semanas de marzo, los enfrentamientos entre pandillas dejaron al menos 208 muertos, 164 heridos y 101 personas secuestradas. La mayoría de las víctimas fueron asesinadas o heridas por francotiradores que presuntamente dispararon al azar contra personas en sus casas o en la calle”, dijo a los periodistas la portavoz de la OACDH, Marta Hurtado.