Elisabeth Borne promete «medios masivos para proteger a los franceses» durante el fin de semana del 14 de julio, durante el cual se prohibirá la venta de morteros pirotécnicos, para evitar nuevos actos de violencia tras los que siguieron a la muerte de Nahel, asesinado por un policía en Nanterre .

“Los medios serán masivos para proteger a los franceses durante estos dos días sensibles” (13 y 14 de julio), declara el primer ministro en una entrevista con Parisian puesta en línea este sábado por la noche. Un decreto, publicado el domingo, prohibirá también la «venta», el «puerto» y el «transporte de morteros pirotécnicos», frecuentemente utilizados por los perpetradores de esta violencia, anuncia. “Solo los profesionales, que organizarán los fuegos artificiales en las comunas, podrán comprarlos”.

Elisabeth Borne también indica que el proyecto de ley de emergencia para ayudar a reconstruir edificios o negocios destruidos durante los disturbios será presentado «durante el próximo Consejo de Ministros» para que sea votado antes de la suspensión de los trabajos de la Asamblea y del Senado este verano.

El gobierno también, para las personas cuyos autos se quemaron durante los disturbios, «activará el fondo de garantía para las víctimas para permitirles ser indemnizadas».

Sobre posibles posibles sanciones para las familias de los jóvenes perpetradores de violencia, el jefe de Gobierno advierte que “si el marco legal existente no es suficiente, entonces, si es necesario, cambiaremos la ley”.

El Gobierno está considerando en este caso una multa específica para los menores, siguiendo el modelo de la multa fija para los adultos cuando cometan tales actos. «Es rápido y eficiente», según Elisabeth Borne.

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Por otro lado, el primer ministro asegura que el gobierno «obviamente no va a privar a los franceses de internet porque hay violencia». El Gobierno prevé «suspender funcionalidades», como la geolocalización, en las redes sociales en caso de nuevos disturbios, pero no pretende realizar un «apagón generalizado» de las plataformas, había indicado el Ejecutivo tras declaraciones presidenciales que habían provocado controversia.

Según comentarios recogidos por la prensa y confirmados por El Elíseo, Emmanuel Macron había sugerido ponerse «quizás en condiciones de regularlos (redes sociales, nota del editor) o cortarlos».