El sistema de justicia argentino rechazó el miércoles, al menos provisionalmente, las reformas laborales incluidas en el “megadecreto” desregulador del presidente ultraliberal Javier Milei, suspendiendo su aplicación en espera de un examen legislativo de fondo.

La Cámara Nacional del Trabajo, organismo de derecho laboral, que había sido contactada por la CGT, la mayor central sindical del país, tomó “una medida cautelar suspendiendo la aplicabilidad” de las disposiciones del capítulo “Trabajo” del decreto de 20 de diciembre.