A pocas semanas de las salidas para las vacaciones de verano, el gobierno busca forzar la mano de las empresas de autopistas para aligerar la cartera de los franceses. «Es importante [que] hagan un gesto comercial», mencionó Clément Beaune este miércoles por la mañana en RTL.

El pasado verano se concedió un 10% de descuento a los automovilistas que paguen con bono vacacional. “Pero llegó a mediados de julio, este año hay que hacerlo antes”, dijo el ministro de Transporte. El Gobierno exige una rebaja del precio de los peajes «de al menos un 10%» así como una reducción del 40% para los viajeros habituales.

“La próxima semana recibiré a las empresas de autopistas” para fijar “los términos” de esta medida, añadió el ministro. Para estos últimos, este gesto es fundamental mientras que los peajes han aumentado un 4,75% este año.

Preguntado por un posible peaje gratuito en verano, Clément Beaune fustigó una «demagogia y mentiras», justificando que «la carretera se financia». Si el 40% del precio de los peajes llega a las arcas del Estado, pide a «las empresas de autopistas que inviertan» el 60% restante «en estaciones de carga o dispositivos de carpooling».