La policía federal brasileña anunció el miércoles 8 de noviembre que había arrestado a dos individuos sospechosos de preparar “ataques terroristas”, que según el Mossad tenían como objetivo la comunidad judía del país y fueron instigados por el Hezbolá libanés.
Las dos detenciones se produjeron en São Paulo, en el marco de una operación policial destinada a «interrumpir los preparativos terroristas y obtener pruebas del posible reclutamiento de brasileños para la práctica de actos extremistas en el país», según explicó la policía federal en un comunicado. en un comunicado de prensa, sin más detalles sobre los posibles objetivos.
La policía también llevó a cabo once registros en los estados de São Paulo, Minas Gerais y el Distrito Federal de Brasilia. El servicio de inteligencia israelí Mossad dijo en otro comunicado que había colaborado con las autoridades brasileñas para “frustrar un ataque en Brasil, planeado por la organización terrorista Hezbollah, dirigido y financiado por el régimen iraní”. El Mossad habla de “una célula terrorista operada por Hezbollah para atacar objetivos judíos e israelíes en Brasil”.
Según el canal brasileño TV Globo, las autoridades brasileñas han pedido a Interpol que emita una alerta roja para el arresto de dos ciudadanos con doble nacionalidad brasileño-libanesa que se encuentran actualmente en el Líbano. Interpol no respondió de inmediato a las solicitudes de la AFP. Las operaciones policiales como las del miércoles son poco comunes en Brasil, un país que se ha librado de ataques a gran escala.
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La comunidad judía brasileña, que cuenta con alrededor de 107.000 miembros, es la segunda más grande de América Latina, detrás de la de Argentina y sus 250.000 miembros. La comunidad judía de Argentina quedó devastada por dos atentados con bombas a principios de los años 1990, contra la embajada de Israel en 1992 (29 muertos y 200 heridos), y luego contra una mutual judía dos años más tarde (85 muertos y 300 heridos).
