Los camarones de Sinaloa, famosos por su exquisito sabor, se convierten en el centro de una disputa comercial entre México y Ecuador. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, respondió con calma a los aranceles del 27% impuestos por Ecuador a las importaciones mexicanas. En medio de esta controversia, Sheinbaum destacó el escaso intercambio comercial entre ambos países, señalando que las importaciones de Ecuador representan apenas el 0,4% del total.
En una conferencia matinal, la mandataria mexicana no dudó en comparar la calidad de los camarones de Sinaloa con los de Ecuador, afirmando que los primeros son más sabrosos. Esta declaración se produce después de que el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, anunciara la imposición del arancel como respuesta a un supuesto «abuso» del cual no dio detalles específicos. Noboa expresó su deseo de firmar un Tratado de Libre Comercio con México, pero hasta que eso ocurra, aplicará el arancel del 27% a las importaciones mexicanas.
Impacto en el Comercio Internacional
Los productos más afectados por estos aranceles son los medicamentos, seguidos de los automóviles y otros vehículos. Las importaciones mexicanas a Ecuador alcanzaron los 541 millones de dólares en 2023, según datos oficiales. Esta medida de Ecuador surge en un momento en el que México ha logrado evitar un arancel del 25% a sus exportaciones hacia Estados Unidos, su principal socio comercial.
Antecedentes Diplomáticos y Consecuencias
Esta disputa comercial entre México y Ecuador se enmarca en un contexto de tensiones diplomáticas previas. En abril pasado, México rompió relaciones diplomáticas con Ecuador después de que la policía local irrumpiera en su embajada en Quito para arrestar al exvicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas. Glas, aliado del exmandatario Rafael Correa, se refugió en la embajada mexicana tras enfrentar acusaciones de corrupción.
La detención de Glas provocó una demanda ante la Corte Internacional de Justicia y generó repudio internacional por la violación a la sede diplomática. Ecuador sostiene que la detención fue legítima, ya que Glas enfrenta condenas por delitos comunes en juicios previos. Como resultado de esta situación, México delegó su representación diplomática en Quito a Suiza.
En medio de esta compleja trama de eventos, el conflicto comercial entre México y Ecuador adquiere una dimensión más amplia. La calidad de los camarones de Sinaloa se convierte en un símbolo de la disputa, mientras que las consecuencias de esta situación impactan en el comercio internacional y en las relaciones diplomáticas entre ambos países.
La presidenta Sheinbaum, con su estilo directo y decidido, busca minimizar el impacto de los aranceles ecuatorianos en las importaciones mexicanas. Mientras tanto, el presidente Noboa defiende su decisión como una medida necesaria ante lo que considera un «abuso» en las relaciones comerciales. En este escenario, los camarones de Sinaloa se erigen como protagonistas involuntarios de una trama política y económica que trasciende las fronteras de ambos países.