Guy Trompat fue puesto en prisión preventiva el jueves 4 de mayo por “instigación al asesinato” contra los sospechosos del asesinato de su hijo Kevin, encontrado muerto con su pareja Leslie Hoorelbeke a principios de marzo, dijo la oficina del fiscal de Niort.

El juicio de este hombre de 50 años, puesto bajo custodia policial el miércoles y presentado para su comparecencia inmediata el jueves por la tarde ante el juzgado penal, se aplaza, a petición suya, al 2 de junio, añade la fiscalía en un comunicado de prensa.

A la espera de esta nueva audiencia, Guy Trompat estará encarcelado en el centro penitenciario de Vivonne (Viena), dijo a la AFP su abogado Me Ambroise Garlopeau. Se trata de un caso paralelo a la investigación llevada a cabo por la fiscalía de Poitiers sobre los “desaparecidos de Deux-Sèvres”, Leslie Hoorelbeke, de 22 años, y Kevin Trompat, de 21, hallados muertos en Charente-Maritime los días 3 y 4 de marzo, después de tres meses de incertidumbre.

En este expediente, abierto inicialmente en Niort tras la desaparición de la pareja a finales de noviembre en Deux-Sèvres y trasladado a finales de diciembre al centro de investigación criminal de Poitiers, se imputaba a cinco jóvenes, en particular por “asesinatos”. , y puesto en prisión preventiva. Guy Trompat también está procesado por “amenazas de muerte materializadas en escrito, imagen o cualquier otro objeto en reincidencia” e incurre en una pena de diez años de prisión, según la fiscalía.

“Se le acusa en particular de haber proferido amenazas de muerte contra los imputados en la causa vinculada a la desaparición de su hijo y de haber ofrecido una suma de dinero a cualquiera que los matara a ellos o a sus seres queridos, a través de las redes sociales. Esta propuesta habría sido retransmitida en varios establecimientos penitenciarios y habría sido seguida por la difusión de fotografías de las personas apuntadas”, explicó el fiscal de Niort Julien Watttebled en un comunicado de prensa.

Kevin Trompat y Leslie Hoorelbeke fueron asesinados a golpes con un “objeto contundente”, según la fiscalía de Poitiers, que mencionó una “decepción sentimental y/o deudas financieras” como posibles móviles de los sospechosos. En el momento de la desaparición de su hijo y su novia, Guy Trompat estaba encarcelado por “violencia voluntaria”. Tras el hallazgo de los cuerpos, organizó una marcha blanca el 12 de marzo en homenaje a las dos víctimas, exigiendo que “se haga justicia”. “Es insuperable. Destruyeron vidas, destruyeron mi vida. No puedo vivir sin mi hijo”, dijo a los periodistas.