El francés Christophe Laporte (Jumbo-Visma) ganó la primera etapa del Critérium du Dauphiné al sprint el domingo en Chambon-sur-Lac. El de Var, de 30 años, ganó cuando el pelotón de favoritos se hizo cargo del belga Rune Herregodts (Intermarché), que se había escapado desde el comienzo del día, a solo diez metros de la meta. Es la 29ª victoria de su carrera para Laporte, que luce el primer maillot amarillo de esta 75ª edición de la Dauphiné.

“Fue realmente límite”: el francés Christophe Laporte se puso el primer maillot amarillo del Critérium du Dauphiné el domingo en Chambon-sur-Lac al atrapar la última fuga del día a solo diez metros de la meta.

Corrida bajo las duchas, la primera etapa de esta 75ª edición llevó al clímax el eterno y cruel juego del gato y el ratón entre la fuga y el pelotón. Último superviviente de la escapada del día, el belga Rune Herregodts ofreció una heroica resistencia al grueso de la tropa en los últimos kilómetros por las carreteras mojadas de Puy-de-Dôme.

En la llama roja, el corredor de Intermarché incluso había recuperado una ventaja de quince segundos al asumir todos los riesgos en el descenso. Pero cuando pensábamos que había hecho la parte más difícil, el belga, que quizás se volteaba con demasiada frecuencia para ver dónde estaba el pelotón, fue atrapado y luego pasado, a pocos metros de la portería.

Y fue Christophe Laporte (Jumbo-Visma), el mejor corredor francés desde principios de año, quien se erigió en cabeza del pelotón para ganar en el sprint por delante del italiano Matteo Trentin (UAE) y… Herregodts, magnífico pero inconsolable tercero. “Fue realmente limitado, con la lluvia, en el descenso, tomó un poco de tiempo, mientras íbamos rápidamente atrás. Lo teníamos en la mira, pero nunca se sabe realmente. Todo el equipo hizo todo lo posible para jugar por la victoria. Incluso Jonas hizo la salida hasta los 300 m de la línea”, comentaba Laporte sobre su líder, el danés Jonas Vingegaard, gran favorito para la clasificación general.

Para Herregodts, el resultado fue desgarrador. Pero para Laporte, esta tercera victoria del año, en solo nueve días de carrera, confirma un comienzo de temporada muy convincente, marcado por sus éxitos en las clásicas de Ghent-Wevelgem y A Travers la Flandre.

También demuestra que el varense de 30 años está en buena forma a menos de un mes del inicio del Tour de Francia (del 1 al 23 de julio), donde volverá a apoyar a Vingegaard y donde había sido el único francés en ganar una etapa l el año pasado. “Sobre el papel ha sido una etapa para mí hoy (domingo), con buenos baches pero no demasiado empinada. Sabía que si me sentía bien, tenía una buena oportunidad”, comentó Laporte, que ahora ha ganado las tres carreras por etapas más importantes de Francia, el Tour de Francia, París-Niza y el Critérium du Dauphiné.

Como premio, se enfundó el primer maillot amarillo de la edición de 2023 que defenderá el lunes durante una etapa de nuevo muy accidentada entre Brassac-les-Mines y La Chaise-Dieu, en Haute-Loire. «Siempre es un honor vestir esta hermosa camiseta amarilla, trataré de honrarla», dijo.

Los favoritos han pasado una jornada bastante incómoda por carreteras resbaladizas por los numerosos chaparrones, a veces brutales, que caían sobre los pilotos. Al final, sin embargo, consiguieron sortear los escollos para llegar agrupados al primer pelotón, aparte de los españoles Enric Mas y Mikel Landa que perdieron 15 y 22 segundos respectivamente.