El mundo volvió a experimentar temperaturas “notables” en abril, marcadas por un nuevo récord mensual de calor en la tierra y en la superficie de los océanos, según el último informe del observatorio europeo Copernicus publicado el miércoles 8 de mayo. El fenómeno climático natural El Niño “siguió debilitándose”, lo que sugiere un posible respiro más adelante en el año, pero sin cambiar nada en la tendencia subyacente de calentamiento impulsado por la combustión masiva de petróleo, carbón y gas fósil.

Desde junio del año pasado, cada mes ha batido su propio récord de calor mensual. Abril de 2024 no es una excepción a la regla, con una temperatura media de 15,03°C, o 1,58°C más que un abril normal en el clima de la era preindustrial (1850-1900). “Aunque es inusual, en 2015-2016 ya se habían observado una serie de récords mensuales de este tipo”, especifica Copernicus. En los últimos 12 meses, la temperatura global ha sido en promedio 1,61°C más alta que en la era preindustrial, superando el límite de 1,5°C establecido por el acuerdo de París de 2015. Sin embargo, esta anomalía debería registrarse en promedio a lo largo de varias décadas. considerar que el clima ha alcanzado este umbral crítico.

La temperatura de la superficie del océano volvió a batir un récord mensual en abril, con 21,04°C de media, excluyendo las zonas cercanas a los polos, marcando el decimotercer récord mensual consecutivo. Este sobrecalentamiento amenaza la vida marina, aporta más humedad a la atmósfera y amenaza la capacidad de los océanos para cumplir su papel crucial en la absorción de las emisiones de gases de efecto invernadero causadas por el hombre. Sin embargo, la temperatura marcó una ligera inflexión respecto a marzo y su récord absoluto, todos los meses combinados (21,07°C).

El fenómeno climático natural El Niño «siguió debilitándose» en abril para avanzar hacia «condiciones neutrales», estima Copérnico. Esta variación natural afecta a la zona ecuatorial del Océano Pacífico e induce el calentamiento global. El Niño “alcanzó su punto máximo a principios de año”, señala Julien Nicolas, lo que puede explicar un ligero cambio en las temperaturas medias en abril con respecto a marzo.

A finales de marzo, la ONU ya advirtió que existía una “alta probabilidad” de que 2024 registre a su vez temperaturas sin precedentes, mientras que 2023 concluye una década de calor récord, empujando al planeta “al borde del abismo”.