La seguridad en torno a esta 106ª final de la Copa de Francia es preocupante. Según RMC Sport, los servicios de la División de Lucha contra el Vandalismo lo clasifican como de muy alto riesgo: 5 en una escala de 5. El encuentro entre Lyon y PSG, previsto para el 25 de mayo, requiere, por tanto, medios de seguridad excepcionales. y la presencia del presidente Emmanuel Macron podría cambiar la situación. Recordemos que el sábado se esperan 30.000 aficionados del Lyon y del París, 15.000 de cada uno, en el estadio Pierre-Mauroy de Lille.