El sector de la construcción, muy afectado por la nueva crisis de la construcción, prevé la eliminación de 150.000 puestos de trabajo de aquí a 2025 y una caída de la actividad para 2023 en Francia, anunció el miércoles el presidente de la Federación Francesa de la Construcción (FFB). «À l’horizon 2025, si rien n’est fait, donc si l’on laisse la crise du neuf s’enclencher, l’activité bâtiment reculera d’environ 8% hors effet de prix, soit 14 milliards d’euros en menos. Esto se traducirá en un aumento real de las quiebras y una caída del empleo, con cerca de 150.000 puestos de trabajo perdidos”, declaró Olivier Salleron en una rueda de prensa.

El FFB, que en primavera esperaba una pérdida de 100.000 puestos de trabajo de aquí a 2025, ya había elevado esta cifra a 135.000 a principios de julio, después de que el Gobierno anunciara el fin gradual del sistema Pinel para apoyar la nueva construcción y el endurecimiento del préstamo a interés cero. (PTZ) para propiedad de vivienda.

Si bien el final del año todavía se beneficia de una cartera de pedidos “que se mantiene en un buen nivel”, el sector revisa a la baja (-0,2% en volumen) su previsión para 2023 para toda la actividad de la construcción, cuando antes esperaba un 0,7%. “Estamos entrando en recesión a nivel general para este año 2023, algo que no estaba previsto”, insistió Olivier Salleron. En detalle, la obra nueva cayó más de lo esperado (-3,1%) debido principalmente a la vivienda (-5,1%). La obra nueva no residencial se mantiene casi estable mientras que la mejora-mantenimiento, que representa más de la mitad de la actividad del sector, muestra un buen comportamiento (2%).

En vivienda nueva, los inicios de construcción cayeron un 16,9% en los siete primeros meses de 2023, respecto al mismo periodo del año anterior. Un movimiento que, según la FFB, «sólo puede aumentar», ya que las licencias de obra caen casi un 28,3% y las ventas de viviendas unifamiliares, un 38,1%.

Si las quiebras empresariales se mantienen contenidas, un 4,6% por debajo de su nivel de los ocho primeros meses de 2019, aumentarán «casi un 39% entre los ocho primeros meses de 2022 y 2023», advirtió Olivier Salleron.

Los únicos elementos positivos son el retorno de la contratación pública (edificios administrativos, escuelas) y la casi duplicación de MaPrimeRénov’, el sistema insignia del gobierno para apoyar la renovación energética. Para limitar la magnitud de la crisis, la FFB pide en particular el redespliegue de la PTZ en más del 40% del territorio y la revalorización de sus escalas.