Los arroceros de las provincias centrales expresaron su descontento mediante una caravana en la vía Interamericana en Veraguas, en rechazo a la importación de 60 mil quintales de arroz que el gobierno tiene previsto recibir el 10 de octubre. La caravana partió desde San Antonio de Atalaya a través de la vía Interamericana hasta llegar a las instalaciones del Ministerio de Desarrollo Agropecuario en la ciudad de Santiago.
Durante la manifestación, los productores, a bordo de sus tractores y con la música de ‘Patria’ de Rubén Blades de fondo, buscaron entablar conversaciones con las autoridades del MIDA. Su principal argumento es que niegan la afirmación del gobierno de que no hay suficiente abastecimiento de arroz en el país. Según el presidente José Raúl Mulino, en una conferencia de prensa, afirmó que «no hay arroz en el país, lo demás es cuento», respaldando así la decisión del Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA) de importar el arroz.
Por otro lado, el productor de arroz, Omar Spiegel, refutó esta afirmación al señalar que se han cosechado 15 mil hectáreas de arroz, lo que equivale a una producción de más de 1 millón y medio de quintales. Aseguró que con la producción actual se puede abastecer el mercado con creces y que los molinos tienen la capacidad necesaria para satisfacer tanto la demanda comercial como la del IMA. Spiegel afirmó que hay suficiente arroz en el país y que esta situación se mantendrá hasta mediados del próximo año.
A pesar de las declaraciones de los productores, el director del IMA defendió la decisión de importar arroz argumentando que no existe abastecimiento suficiente en el país. Afirmó que el IMA importará arroz en conjunto con los molinos, pero buscarán hacerlo en momentos estratégicos para no afectar el mercado local. Sin embargo, recordó que en una ocasión se anunció que sí había arroz disponible, pero al final solo se pudo obtener 5 mil quintales.
La controversia en torno al abastecimiento de arroz inició el 11 de septiembre, cuando el director del IMA anunció la importación de 60 mil quintales para garantizar la oferta en las agroferias destinadas a personas de bajos recursos. A pesar de que inicialmente se acordó que la producción nacional sería suficiente, posteriormente se confirmó la importación de los 60 mil quintales de arroz de Estados Unidos, lo cual generó descontento entre los arroceros.
En conclusión, la disputa entre los productores de arroz y las autoridades gubernamentales continúa en torno al abastecimiento de arroz en el país. Mientras los productores aseguran que hay suficiente producción nacional para cubrir la demanda, el gobierno defiende la importación como medida para garantizar el suministro de arroz a la población. La situación sigue en desarrollo y es necesario un diálogo continuo entre ambas partes para encontrar una solución que beneficie a todos los involucrados en la cadena de producción de arroz en Panamá.