Un estadounidense de 44 años condenado a muerte por el asesinato y violación de una estudiante en 1996 fue ejecutado el jueves mediante inyección letal en Oklahoma, anunciaron el fiscal y la administración penitenciaria de este estado del centro del país.

La violación y el asesinato de Juli Busken, de 21 años, estudiante de danza en la Universidad de Oklahoma, permanecieron sin resolver hasta que se realizaron pruebas de ADN a Anthony Sánchez tras su encarcelamiento en Oklahoma en 2002 por robo. Posteriormente, la policía estatal cotejó su ADN con el encontrado en la víctima, lo que llevó a la sentencia de muerte de Anthony Sánchez en 2006.

Este último siguió proclamando su inocencia y recientemente atribuyó el crimen a su padre, que se suicidó en 2022 y habría confesado haberlo cometido, según él. Pero las pruebas de ADN realizadas al fallecido invalidaron esta teoría y los recursos de Anthony Sánchez para obtener una suspensión de la ejecución fueron rechazados. Fue ejecutado el jueves por la mañana en la penitenciaría estatal de la ciudad de McAlester.

Oklahoma reanudó las ejecuciones capitales en 2021 tras una moratoria de seis años debido a ejecuciones fallidas en 2014 y 2015. La de Anthony Sánchez es la tercera desde principios de año. Esta es la decimoctava ejecución en Estados Unidos en 2023, todas ellas realizadas mediante inyección letal.