Cerca del 90% de las adolescentes y mujeres jóvenes de los países más pobres no utilizan internet, una proporción superior a la de los niños y hombres de la misma edad, según un informe de Unicef, que subraya el papel de la educación en estas desigualdades.

En 2020, Unicef ​​y la Unión Internacional de Telecomunicaciones estimaron que solo el 37% de los jóvenes de 15 a 24 años en todo el mundo tenía acceso a Internet en casa. Pero esta estimación «oculta llamativas disparidades de género, vinculadas al acceso a equipos, uso de Internet y habilidades digitales dentro de los hogares», señala el informe de Unicef ​​publicado el miércoles.

Por lo tanto, la agencia de la ONU analizó los datos de uso de encuestas en 54 países, principalmente países de bajos ingresos y algunos de ingresos medios. Como resultado, “en los países de bajos ingresos, el 90 % de las adolescentes y mujeres jóvenes de 15 a 24 años (alrededor de 65 millones de personas) no están en línea, en comparación con el 78 % de los adolescentes y hombres jóvenes de la misma edad (casi 57 millones). ) que no utilizan Internet”, estima el informe.

“Cerrar la brecha digital entre niñas y niños no se trata solo de proporcionar acceso a Internet y tecnología”, dijo Robert Jenkins, director de educación de UNICEF, en un comunicado. «Se trata de empoderar a las niñas para que se conviertan en innovadoras, creadoras, líderes». El informe señala que aunque las niñas en general tienen mejores habilidades básicas de lectura, esto no se traduce en el ámbito digital.

En estos países, “las niñas adolescentes y mujeres jóvenes son olvidadas y rezagadas en cuanto a conocimientos digitales”, lamenta Unicef, que destaca especialmente la importancia del entorno familiar y la educación en esta situación. “Si queremos abordar las desigualdades de género en el mercado laboral, especialmente en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, debemos comenzar ahora por ayudar a los jóvenes, especialmente a las niñas, a adquirir habilidades digitales”, suplicó Robert Jenkins.

La brecha también es amplia cuando se trata de acceso a teléfonos móviles, según el informe. Así, en 41 de los países estudiados, las jóvenes y mujeres de 15 a 24 años se encuentran «en gran desventaja», con una probabilidad media del 13% de poseer un teléfono móvil, «limitando su acceso al mundo digital» que, sin embargo, es fundamental en la economía del siglo XXI.