El fiscal especial que investiga al hijo del presidente estadounidense Joe Biden, Hunter, ha anunciado planes para acusarlo de posesión ilegal de un arma de fuego, según documentos judiciales publicados el miércoles.
El fiscal especial David Weiss dice en el documento que las reglas del tribunal le dan hasta el 29 de septiembre para lograr que un gran jurado emita una acusación en el caso. La fiscalía tiene intención de hacerlo «antes de esa fecha», añade.
Hunter Biden, de 53 años, está acusado de evasión de impuestos y de adquirir un arma de fuego siendo drogadicto. El hijo del presidente demócrata había llegado en junio a un primer acuerdo para declararse culpable con el fiscal Weiss en Delaware (este), estado de origen de la familia Biden, lo que probablemente le habría permitido evitar la cárcel y un juicio embarazoso. Pero en julio, un juez cuestionó la validez del acuerdo, que fue anulado. Posteriormente se declaró inocente de evasión fiscal.
El fiscal especial dijo en agosto que había cerrado la investigación de evasión fiscal en Delaware, pero destacó que se reabriría en otros estados. Hunter Biden, abogado y cabildero, está acusado de no presentar sus declaraciones de impuestos en 2017 y 2018 sobre ingresos por un total de 1,5 millones de dólares. El predecesor de su padre, Donald Trump, y muchos otros republicanos lo han convertido en uno de sus objetivos favoritos, considerándolo el talón de Aquiles de Joe Biden. Los parlamentarios conservadores le acusan, en particular, de haber realizado negocios dudosos en Ucrania y China mientras Joe Biden era vicepresidente de Barack Obama (2009-2017), aprovechando las redes y el nombre de su padre.
