El gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, pidió el viernes al gobierno francés que elabore un presupuesto para 2024 que demuestre “más compromiso y credibilidad”. «En el pasado, mi país no ha logrado respetar sus compromisos presupuestarios», señaló el banquero central durante un discurso en Santiago de Compostela (España), donde se reunieron los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea. “Espero sinceramente que la próxima ley plurianual de programación de finanzas públicas y el presupuesto para 2024 demuestren más compromiso y credibilidad”, continuó.
Para reducir la pesada deuda de Francia, el Gobierno indicó el jueves que presentará a finales de septiembre un presupuesto para 2024 que sellará el fin gradual de «cueste lo que cueste» e identificará 16.000 millones de euros en ahorros, esencialmente gracias al fin previsto del escudo tarifario de electricidad. El ejecutivo pretende reducir la deuda del país del 111,8% del PIB en 2022 al 108,1% en 2027. El déficit público debería aumentar del 4,8% del PIB en 2022 al 4,9% en 2023, luego al 4,4% en 2024 y al 2,7% a finales de el plazo de cinco años, por debajo del objetivo europeo del 3%.
En el primer trimestre de 2023, la deuda francesa superó por primera vez el umbral simbólico de los 3.000 millones de euros (114,8% del PIB), tras haber aumentado enormemente desde la crisis sanitaria. «Al mismo tiempo que la inflación es elevada, las deudas públicas han alcanzado niveles históricos debido a ondas de choque sin precedentes, pero también, en diferentes países, a deudas acumuladas en el pasado», subrayó François Villeroy de Galhau. «Ahora que estos shocks se están disipando, los gobiernos deben evitar posiciones excesivamente expansivas que alimentarían aún más las presiones inflacionarias», añadió.