(Londres) Los precios del petróleo cayeron el jueves a raíz de reservas de crudo estadounidenses mayores de lo esperado y anuncios del banco central estadounidense que apoyaban al dólar.
Alrededor de las 07:00 (hora del Este), el precio del barril de Brent del Mar del Norte, para entrega en agosto, perdió un 0,73%, hasta 82,00 dólares.
Su equivalente estadounidense, el barril de West Texas Intermediate (WTI), para entrega en julio, cayó un 0,84%, hasta 77,84 dólares.
«Después de que el banco central estadounidense dejara sin cambios su tipo de interés» y «planeara sólo una reducción de los costes de endeudamiento este año», «el sentimiento se ha deteriorado un poco» en el mercado del oro negro, señala Tamas Varga, de PVM Energy.
Sin embargo, la perspectiva de tipos más altos fortalece al dólar, lo que lo encarece y por tanto desincentiva las compras de crudo, denominado en esta moneda.
El miércoles, la Reserva Federal (Fed), como se esperaba, dejó los tipos sin cambios en su nivel más alto en más de dos décadas, en el rango del 5,25% al 5,50%.
Para 2024, la institución monetaria apuesta ahora por un único recorte de tipos, mientras que en marzo había previsto tres reducciones.
El sentimiento también se deterioró para el oro negro después de la publicación del informe de la Administración de Información Energética de EE.UU. sobre los inventarios estadounidenses el miércoles, que destacó un aumento de las reservas de crudo del 3,7% en millones de barriles durante la semana que finalizó el 7 de junio.
La API, la federación de profesionales del sector, sin embargo, esperaba una disminución de las reservas comerciales de crudo durante el período.
Este “aumento inesperado” de los inventarios estadounidenses se suma al último informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE) del miércoles que afirma “que el mercado mundial del petróleo se enfrenta a un superávit “importante” en esta década debido al abandono de los combustibles fósiles. ”, afirma Ipek Ozkardeskaya, analista del Swissquote Bank.
La AIE estima que se espera que el suministro total alcance casi 114 millones de barriles por día para 2030, 8 millones de barriles por día por encima de la demanda mundial proyectada para esa fecha.