(Nueva York) Los precios del petróleo registraron su cuarta sesión positiva en cinco días de negociación, pero el impulso del oro negro está perdiendo fuerza y ​​el mercado espera señales tangibles de fortalecimiento de la demanda.

El precio del barril de Brent del Mar del Norte, para entrega en agosto, finalizó con un avance del 0,35%, hasta 81,92 dólares.

El barril de American West Texas Intermediate (WTI), con vencimiento en julio, ganó un 0,20%, hasta 77,90 dólares.

El oro negro había empezado con mal pie, digiriendo el salto del día anterior. Pero los cursos finalmente salieron de su letargo gracias a varias publicaciones.

El cartel espera que el sector de servicios mantenga su impulso en el segundo semestre, «particularmente en viajes y turismo, que se espera que tenga un impacto positivo en la demanda de petróleo», según el informe.

Por su parte, la Administración de Información Energética (EIA) estadounidense elevó su proyección de demanda para 2024 hasta los 102,98 millones de barriles diarios (mbd), frente a los 102,84 de mayo.

En particular, prevé una aceleración del consumo de petróleo crudo en China y la India.

Al mismo tiempo, la EIA rebajó su previsión de producción de 102,76 mbd a 102,57, debido al compromiso de los miembros de la OPEP y sus aliados en el acuerdo de la OPEP de extender todos sus recortes de producción al menos hasta octubre.

Estas cifras “soportan los precios por ahora”, pero la situación sigue siendo frágil, según el analista de Again Capital, John Kilduff.

«Ahora necesitamos señales de demanda», advierte el analista, para quien el informe semanal de la EIA sobre las existencias estadounidenses de petróleo y productos refinados, previsto para el miércoles, «va a ser muy importante para el mercado». Si las entregas de gasolina “caen aún más por debajo de los 9 millones de barriles por día, el panorama se oscurecerá y será difícil preservar los avances recientes”, añade.

Por tanto, el mercado espera un aumento de la demanda de aire acondicionado y, por tanto, de electricidad, cuya producción en gran parte se realiza con gas natural.