El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, abogó el miércoles por el regreso de Estados Unidos a la UNESCO para contrarrestar a China en particular. “Realmente creo que deberíamos volver a la Unesco”, dijo el secretario de Estado ante una comisión parlamentaria. “No para darles un regalo, sino porque lo que sucede allí realmente importa”, dijo, citando en particular los debates dentro de la organización con sede en París sobre inteligencia artificial o en educación.
Estados Unidos se había retirado bajo el expresidente Donald Trump de la agencia de educación, ciencia y cultura de la ONU a fines de 2018, en represalia por un sesgo que, según dijo, era antiisraelí. Ya habían suspendido el pago de sus cuotas en 2011 cuando los palestinos se convirtieron en miembros.
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«China es ahora el mayor contribuyente a la Unesco», señaló Antony Blinken y «ni siquiera estamos en la mesa. Es importante que volvamos». El Departamento de Estado de EE. UU. ha solicitado 150 millones de dólares para financiar este eventual retorno en la propuesta presupuestaria de la administración Biden para 2024, que se presentó recientemente al Congreso para su aprobación.
