Los acuerdos de principio negociados con los tres grandes fabricantes de automóviles estadounidenses, Ford, Stellantis y General Motors, fueron ratificados por sus empleados sindicalizados en el UAW, que encabezó una huelga sin precedentes de más de seis semanas, declaró el sábado a la AFP una fuente sindical. “Los tres están ratificados”, se limitó a decir esta fuente, sobre estos acuerdos celebrados por cada fabricante con el sindicato United Auto Workers.
Según datos publicados el jueves en el sitio web del sindicato, aproximadamente el 55% del personal remunerado por horas de General Motors ha dado luz verde a este contrato que deberá aplicarse durante los próximos cuatro años. Los empleados sindicalizados de Ford y Stellantis han hecho lo propio con el 67,4% de los votos a favor en el primero y el 66,8% en el segundo, según los datos publicados el sábado en el sitio web del sindicato. Stellantis, propietario de las marcas Jeep y Chrysler en particular, confirmó esta ratificación en un comunicado de prensa.
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«Con las negociaciones ahora oficialmente detrás de nosotros, centraremos toda nuestra atención en implementar nuestro plan estratégico ‘Dare forward 2030’ y proporcionar a nuestros clientes los productos y tecnologías de alta calidad que quieren y esperan. », Comentó Mark Stewart, director operativo del grupo, citado en el comunicado de prensa. Contactados por la AFP, el sindicato y Ford no reaccionaron de inmediato.
Shawn Fain, presidente del UAW elegido en la primavera, lanzó un movimiento sin precedentes en los noventa años de historia de la organización al lanzar una huelga entre los «Tres Grandes» de Detroit al mismo tiempo. De tres fábricas que empleaban a 12.700 miembros sindicales al inicio de la huelga el 15 de septiembre, las huelgas crecieron a lo largo de las semanas para movilizar a más sitios y a más de 45.000 de los 146.000 miembros del UAW que trabajan para los tres fabricantes. Todos los trabajadores en huelga volvieron a trabajar tan pronto como se anunciaron los acuerdos de principio, sin esperar las ratificaciones como es habitual.
En particular, el sindicato exigió un aumento salarial del 40% en cuatro años, correspondiente al que disfrutan los dirigentes del grupo durante cuatro años. “Beneficios récord significan contratos récord”, repitió Shawn Fain una y otra vez. Los acuerdos alcanzados prevén un aumento del salario base del 25% durante los cuatro años de vigencia del convenio colectivo, medidas de ajuste por costo de vida, beneficios sociales, mejoras para los jubilados, entre otros. También contienen especificidades según el grupo, como en Stellantis en materia de empleo, o el abandono del plan de cierre de la fábrica de Belvidere (Illinois) de General Motors.