El presidente de la República, José Raúl Mulino, y su homólogo colombiano Gustavo Petro se reunieron para establecer una estrategia conjunta contra la migración ilegal por Darién. Esta reunión tuvo lugar en Nueva York, Estados Unidos, al margen de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Ambos líderes acordaron la importancia de trabajar juntos para abordar el problema de la migración ilegal, que afecta no solo a Panamá y Colombia, sino también a otros países, como Estados Unidos. Se destacó la necesidad de una colaboración trilateral que involucre a estas naciones para abordar de manera efectiva este desafío.
El presidente Mulino enfatizó que la migración ilegal por Darién está causando graves daños económicos y ambientales a Panamá. Además, subrayó que esta crisis humanitaria también tiene un impacto devastador en la vida de muchas personas, incluidos niños que han perdido a sus padres durante el peligroso viaje a través de la selva darienita.
Por su parte, el presidente Petro propuso la definición de tres rutas para desalentar el paso de migrantes por áreas no controladas. Esta medida busca garantizar la seguridad de los migrantes y reducir el impacto negativo de la migración ilegal en la región.
En la reunión participaron también importantes funcionarios, como el canciller panameño, Javier Martínez-Acha; el ministro de Seguridad, Frank Ábrego; y el ministro de Comercio, Julio Moltó. Por parte de Colombia, estuvo presente el canciller Luis Murillo, demostrando el compromiso de ambos países en abordar esta problemática de manera conjunta.
El presidente Mulino, durante su participación en la Asamblea General de la ONU, abordará temas relacionados con la crisis migratoria y la inclusión de Panamá en listas discriminatorias. Destacará la importancia de la cooperación internacional para hacer frente a esta crisis humanitaria en la frontera de Darién.
En cuanto a la crisis humanitaria en la región, Mulino señaló que Panamá está enfrentando un problema de magnitud internacional que requiere la colaboración de todos los países involucrados. A pesar de la disminución en el flujo de migrantes por la ruta del Darién, la aparición de ciudadanos de Nepal y China en mayor número indica que la crisis tiene alcance global.
El presidente Mulino ha manifestado su rechazo a las listas grises que incluyen a Panamá, calificándolas como discriminatorias. En este sentido, anunció que el Estado no otorgará contratos públicos ni licitaciones importantes a países que incluyan a Panamá en estas listas. Esta medida busca proteger los intereses de Panamá y promover la igualdad en las relaciones internacionales.
Durante su participación en diversos encuentros y foros, como la Cumbre del Futuro, el presidente Mulino ha alertado sobre la ralentización de la Agenda 2030 y los conflictos que están exacerbando la pobreza y el hambre en muchos países. Estos desafíos globales requieren una acción conjunta y solidaria de la comunidad internacional para lograr un mundo más justo y equitativo.