Mientras una persona sigue desaparecida tras la explosión en un edificio de la rue Saint-Jacques, en el distrito 5 de París, la búsqueda bajo los escombros tuvo que ser interrumpida este viernes por la mañana por razones de seguridad, supo Le Figaro en la jefatura de policía. Debilitados por la explosión, los edificios adyacentes presentan un riesgo de derrumbe que requiere la intervención de especialistas para consolidarlos.
Estos expertos analizarán el nivel de riesgo y qué se puede hacer para estabilizar la situación. “Sin embargo, los servicios técnicos y los bomberos siguen movilizados en el lugar”, subraya la jefatura de policía.
La violenta explosión ocurrida el 21 de junio alrededor de las 16:45 horas en una escuela de moda privada, cuyo edificio está catalogado como monumento histórico, dejó alrededor de medio centenar de heridos, incluidos seis en absoluta emergencia, según el informe comunicado este jueves por la fiscalía de París. .
Los «primeros elementos (…) nos llevan a confirmar que esta explosión partió de este edificio», declaró la fiscal, Laure Beccuau. Pero las causas de la explosión siguen sin determinarse en esta etapa y deben ser establecidas por la policía judicial de París a cargo de la investigación abierta por «lesiones involuntarias por violación manifiestamente deliberada de una obligación de prudencia o seguridad».
Si hay que tener precaución, parece que va tomando forma la estela de una explosión vinculada a una fuga de gas. Testigos entrevistados por periodistas en el lugar la noche de la explosión mencionaron fuertes olores a gas. El secretario general de Educación Católica, cuyo local está muy cerca del edificio derrumbado, dijo a RMC que “un empleado había percibido fuerte olor a gas y fue a ver qué pasaba debajo del porche (…) Mientras el contador marcaba el número de teléfono” del servicio de emergencia de la empresa suministradora de gas, “se produjo la explosión”. Según Le Parisien y France info, esta hipótesis también es favorecida por los investigadores.
