Exactamente dos años después de los hechos, los familiares de las personas asesinadas durante el tiroteo en Uvalde (Texas) y las víctimas supervivientes llevaron a los tribunales a Meta el viernes 24 de mayo, así como a la editorial de videojuegos Activision y al fabricante del arma homicida, acusados de haber contribuido al acto del asesino. El 24 de mayo de 2022, un exalumno de la escuela primaria Robb, Salvador Ramos (18 años en ese momento), ingresó al local armado con un rifle de asalto AR-15, antes de apagar el fuego. Causó la muerte de 19 niños y dos profesores e hirió a 17 antes de ser asesinado a tiros.
“Existe un vínculo directo entre la conducta de estas empresas y el tiroteo de Uvalde”, afirmó en un comunicado el abogado Josh Koskoff, que representa a los familiares y supervivientes que han decidido emprender acciones legales. Para él, Meta, Activision y Daniel Defense, fabricante del arma, forman “un monstruo de tres cabezas”, que “expuso a sabiendas” a Salvador Ramos “al arma, le llevó a verla como una forma de solucionar sus problemas. y lo entrenó para usarlo. Señaló la responsabilidad de Instagram, filial de Meta, que “permite” según él “a los fabricantes de armas entrar en contacto con los consumidores”, incluidos los más jóvenes.
En cuanto a Activision, la editorial “debería dejar de entrenar y acostumbrar a los niños a matar”, insistió el abogado. El estudio Activision Blizzard fue comprado en otoño de 2023 por Microsoft. Es, en particular, el editor del juego de disparos en primera persona “Call of Duty”, en el que un personaje se ve obligado a matar a sus oponentes con armas de fuego o cuchillos para cumplir su misión o defenderse. La citación contra Meta y Activision fue presentada en un tribunal de Los Ángeles y la de Daniel Defense en Uvalde.
“El tiroteo en Uvalde fue horrible y trágico y expresamos nuestro apoyo a las familias y personas que siguen afectadas por este acto de violencia sin sentido”, reaccionó un portavoz de Activision a la AFP. Añadió que “millones de personas juegan videojuegos en todo el mundo sin cometer actos horribles posteriormente”. Consultados por la AFP, Meta y Daniel Defensa no respondieron de inmediato.
Las mismas familias y sobrevivientes citaron el miércoles a casi 100 agentes de la Policía Estatal de Texas, acusándolos de cometer errores durante el tiroteo. Un informe del Ministerio de Justicia publicado en enero señalaba una “cascada de fracasos” en la reacción de la policía. Los familiares de las víctimas también anunciaron el miércoles que habían llegado a un acuerdo amistoso con el ayuntamiento de Uvalde, que prevé el pago de dos millones de dólares en concepto de indemnización.
Josh Koskoff se dio a conocer al conseguir, en 2022, que el fabricante de armas estadounidense Remington pagara 73 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios a las familias de nueve víctimas del tiroteo en la escuela de Sandy Hook (2012).