El club brasileño Palmeiras emprendió acciones legales el martes tras ser blanco de nuevas acusaciones del magnate estadounidense John Textor, propietario en particular del Botafogo y del Olympique Lyonnais, que consideró que el último campeonato brasileño estuvo manchado de corrupción.
El bicampeón brasileño indicó en un comunicado de prensa que había solicitado al Tribunal Superior de Justicia Deportiva (STJD) que garantice que el señor Textor “se abstenga de hacer cualquier tipo de mención o referencia al Palmeiras en los medios de comunicación, bajo pena de multa o suspensión.
La temporada pasada, Botafogo vivió una debacle histórica: líder del campeonato nacional durante 31 de 38 jornadas, el club carioca tenía hasta 13 puntos de ventaja, pero terminó sólo quinto y permitió al Palmeiras ganar el título por segundo año consecutivo. .
Pero John Textor, que compró el club en marzo de 2022, ha afirmado repetidamente que la competición está amañada.
Volvió a la carga el lunes: en una entrevista con un canal de YouTube y luego en un comunicado publicado en su sitio, aseguró tener “pruebas sólidas” de que el Palmeiras “se benefició del amaño de partidos durante al menos dos temporadas”.
El técnico, propietario también del club inglés Crystal Palace y del equipo belga RWD Molenbeek, afirmó tener pruebas “100% confirmadas por expertos e inteligencia artificial” y extraídas del análisis de dos victorias en dobles del campeón brasileño, ante el Fortaleza (4- 0 en noviembre de 2022) y Sao Paulo FC (5-0 en octubre de 2023).
Cita «diferencias anormales» en el comportamiento de algunos jugadores de estos dos equipos, que, según él, habrían disminuido voluntariamente el ritmo para permitir al Palmeiras ganar estos dos partidos.
Tanto el club Fortaleza como el Sao Paulo FC rechazaron las acusaciones, exigieron que Textor presentara las pruebas y anunciaron que emprenderían acciones legales.
En noviembre, el empresario estadounidense fue suspendido durante un mes por el STJD tras acusar de corrupción a la Confederación Brasileña de Fútbol tras la derrota del Botafogo por 4-3 ante el Palmeiras.
El presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, también había presentado una denuncia por difamación.
El fútbol brasileño se vio afectado el año pasado por un gran escándalo de amaño de partidos, incluso en primera división, para garantizar jugosos beneficios en las casas de apuestas.
Varios jugadores sospechosos de corrupción han sido suspendidos y una comisión parlamentaria de investigación creada por iniciativa del legendario ex delantero Romario, ahora senador, deberá investigar este asunto antes de fin de mes.