Le Figaro Burdeos

Es demasiado cierre. Desde el 12 de julio y hasta el 17 de agosto no habrá servicio de urgencias en el centro hospitalario de Sainte-Foy-la-Grande (Gironda), para disgusto de la alcaldesa de la localidad, Christelle Guionie, que “condena enérgicamente este enésimo cierre” y afirma que no puede “aceptar la situación en la que se encuentra nuestro servicio público de hospitales”. El funcionario electo deplora una “situación catastrófica” y llama a “defender” el hospital.

Porque desde hace varios meses, los cierres se han vinculado a Sainte-Foy-la-Grande. Debido a la escasez de personal, las emergencias ya se cerraron durante varios días en diciembre de 2022, luego en marzo y mayo, y diez días seguidos en abril, lo que llevó a los funcionarios electos locales a temer un cierre permanente. En abril, Christelle Guionie escribió una carta al Ministro de Salud y al director de la agencia regional de salud (ARS) de Nueva Aquitania para dar la voz de alarma.

Afirmando que «el hospital de Sainte-Foy-la-Grande es un equipamiento esencial y estructurante de nuestro territorio», el concejal ha escrito que el servicio de urgencias permite «a miles de habitantes acceder a un servicio público asistencial, de calidad y de proximidad, en un territorio muy frágil social y sanitariamente”. Recordando que los habitantes del departamento “ya sufren de escasez de médicos generales y especialistas”, pidió a los servicios del Estado “encontrar una solución duradera para el hospital de Sainte-Foy-la-Grande, cuyo anclaje espacial es fundamental para las necesidades de nuestro territorio».

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En abril se realizó una manifestación frente al hospital para denunciar la interrupción de este servicio. Al mes siguiente, el director de la Agencia Regional de Salud, Benoît Elleboode, visitó el sitio y dijo que no habría un cierre permanente de la sala de emergencia. Una declaración que tranquilizó a los funcionarios electos locales, pero tres meses después, “la ARS no pudo encontrar ninguna solución para garantizar la continuidad de nuestro servicio de emergencia, como para Blaye, Langon o ciertos establecimientos en Dordoña”, lamenta Christelle Guionie.

«Una vez más son los Foyennes y los Foyens, así como los habitantes de territorios alejados de las grandes ciudades o de los grandes centros turísticos los que no se benefician de una cobertura médica digna y equivalente a la de Burdeos o la cuenca de Arcachon», lamenta el alcalde de la ciudad. Está prevista una movilización para el 29 de julio a las 10 horas frente al centro hospitalario, “para defender la salud en las zonas rurales”. Durante el cierre de emergencias, se implementa una solución temporal con el centro hospitalario de Libourne, ubicado a unos 40 kilómetros de Sainte-Foy-la-Grande.